¿Qué es la disfunción eréctil?

La disfunción eréctil (impotencia) es la incapacidad para conseguir una erección o mantenerla con la suficiente firmeza para tener una relación sexual.

La disfunción eréctil no es una enfermedad, sino un síntoma, el Dr Darío Wetschky, director de AndroAr, señala que, en ausencia de una causa psicógena, es «un síntoma de una afectación de vasos y nervios responsables de la erección, sea por el envejecimiento,  hábitos como el tabaquismo y el sedentarismo, o enfermedades como la  diabetes, hipertensión y la obesidad.» De hecho recalca que «las enfermedades cardiovasculares son una causa importante de este padecimiento».

Síntomas

Los síntomas de la disfunción eréctil pueden comprender:

• Problemas persistentes para tener una erección
• Problemas persistentes para mantener la erección
• Disminución persistente del deseo sexual

Causas

La excitación sexual masculina es un proceso complejo que involucra al cerebro, las hormonas, las emociones, los nervios, los músculos y los vasos sanguíneos. La disfunción eréctil puede ser el resultado de un problema con alguno de dichos factores. Del mismo modo, el estrés y las inquietudes relacionadas con la salud mental pueden provocarla o empeorarla.

A veces, la disfunción eréctil se debe a una combinación de cuestiones físicas y psicológicas. Por ejemplo, una enfermedad física menor que hace que la respuesta sexual sea más lenta puede generar ansiedad con respecto a mantener una erección, y esto podría provocar o empeorar la disfunción.

Causas físicas de la disfunción eréctil

En muchos casos se ven involucrados factores físicos tales como:

• Enfermedad cardíaca
• Vasos sanguíneos obstruidos (ateroesclerosis)
• Nivel de colesterol alto
• Presión arterial alta
• Diabetes
• Obesidad
• Síndrome metabólico: afección que implica un aumento en la presión arterial, niveles altos de insulina, grasa corporal alrededor de la cintura y niveles altos de colesterol
• Enfermedad de Parkinson
• Esclerosis múltiple
• Determinados medicamentos con receta
• Consumo de tabaco
• Enfermedad de De Peyronie: tejido cicatricial dentro del pene
• Abuso de alcohol y de otras sustancias
• Trastornos del sueño
• Tratamientos contra el cáncer de próstata o el agrandamiento de la próstata
• Cirugías o lesiones que afecten la zona pélvica o la médula espinal 

El cerebro cumple una función clave en la activación de los sucesos físicos que provocan una erección, los cuales empiezan con la sensación de excitación sexual. Varias situaciones pueden interferir en los sentimientos sexuales y provocar o empeorar la disfunción eréctil. Algunas de ellas son:

• Depresión, ansiedad u otros trastornos de salud mental
• Estrés
• Problemas de pareja debido a estrés, mala comunicación u otras preocupaciones

Factores de riesgo

A medida que se envejece, es posible que se tarde más tiempo en tener una erección y que esta no sea tan firme. Para lograrlo, se necesitaría tener un contacto más directo en el pene.

Varios factores de riesgo pueden contribuir a la disfunción eréctil, entre ellos se enumeran:

• Enfermedades,en particular la diabetes o las cardiopatías
• El consumo de tabaco,que limita el adecuado flujo de sangre a las venas y arterias del pene fundamentales para una erección
• El sobrepeso y la obesidad
• Determinados tratamientos médicos,como cirugía de próstata o radioterapia contra el cáncer
• Lesiones,en particular si estas dañan los nervios o las arterias que controlan las erecciones
• Medicamentoscomo antidepresivos, antihistamínicos y medicamentos para tratar la presión arterial alta, el dolor o las enfermedades de la próstata
• Trastornos psicológicos,como estrés, ansiedad o depresión
• Consumo de alcohol y de drogas,en especial si es de larga data

Tratamientos Posibles

Terapias regenerativas

• Andro&PRP: Es un tratamiento autólogo de factores obtenidos de nuestra propia sangre que incorporados en los cuerpos cavernosos produce una regeneración vascular, nerviosa y tisular. A diferencia de otros tratamientos farmacológicos comunes como el Tadalafilo o Sildenafilo, no tienen contraindicaciones ni toxicidad cardiológica.

El Dr Dario Wetschky explica “La potencia sexual normalmente se disminuye porque hay fallas en el sistema circulatorio. Al aumentar la irrigación en los cuerpos cavernosos se logra mejorar la erección,  además de generar un efecto regenerativo tisular general, pudiéndose observar un rejuvenecimiento del pene e incluso, en algunos casos, un discreto aumento del tamaño del mismo”

• Ondas de Choque de baja energía: son un tratamiento muy eficaz para pacientes con disfunción eréctil (DE) de origen vasculartal como lo afirman las Guías de la Asociación Europea de Urología actualizadas en 2017.

• Inyeccion Intracavernosa de Drogas Vasoactivas: es un recurso tanto diagnóstico como terapéutico que consiste en la aplicación de una droga que estimula la actividad circulatoria en los cuerpos cavernosos del pene.Su uso en medicina sexual no es novedoso, y data del año 1982 cuando el Dr. Ronald Virag presentó a la papaverina administrada para la disfunción eréctil.

• Drogas de administración oral 

• Bombas de vacío

• Psicoterapias cognitivo conductuales: Se utilizan como tratamiento principal en los casos en los que la causa es de origen psicógeno, o complementario en los casos de afecciones orgánicas. Esta herramienta que estimulamos en AndroAr, son terapias cortas, que en general no superan las 12 sesiones, y que le dan al paciente las herramientas para poder seguir mejorando su rendimiento sexual en su hogar. Es importante aclarar que este tratamiento muy difundido en el primer mundo, tienen tasas de éxitos elevadas y comprobadas con rigor científico.

• Implantes Peneanos: Son dispositivos que se colocan dentro del pene para permitir que se logre llevar a cabo una erección. Generalmente se recomiendan después de que otros tratamientos para la disfunción eréctil han fracasado. Sin embargo debido a la ausencia de toxicidad cardiaca y la alta satisfacción experimentada con estos dispositivos, muchos pacientes los eligen como primera opción. Hay dos tipos de implantes penianos, semirrígidos e inflables,  que funcionan de maneras diferentes y que poseen diversas ventajas y desventajas. La colocación de los mismos requiere de una cirugía. Antes de elegirlos, asegúrese de comprender en qué consiste la cirugía, los posibles riesgos, complicaciones y que el equipo médico sea idóneo en el tema.

En todos los casos los tratamientos deben acompañarse de un cambio en los hábitos nutricionales, control del sobrepeso y un plan de ejercicios, para poder maximizar los resultados y que estos perduren en el tiempo.